Una biopsia pulmonar se puede realizar mediante un método abierto o cerrado. Los métodos cerrados se realizan a través de la piel o a través de la tráquea. La biopsia abierta se realiza en el quirófano con anestesia general.
Los diversos procedimientos de biopsia incluyen:
Biopsia por punción.
Biopsia transbronquial.
Biopsia toracoscópica.
Aspiración transtorácica con aguja.
Biopsia aspirativa percutánea con aguja.
Una biopsia pulmonar se puede realizar mediante un método abierto o cerrado. Los métodos cerrados se realizan a través de la piel o a través de la tráquea. La biopsia abierta se realiza en el quirófano con anestesia general.
Los diversos procedimientos de biopsia incluyen:
Biopsia por punción.
Biopsia transbronquial.
Biopsia toracoscópica.
El examen de biopsia pulmonar está indicado en caso de:
Evaluar una anomalía observada en una tomografía computarizada o radiografía de tórax.
Diagnosticar infección pulmonar u otra enfermedad pulmonar
Investigar la causa de la acumulación inexplicable de líquido en el pulmón
Determinar si una masa en el pulmón es maligna (cancerosa) o benigna
Determinar la etapa de los tumores malignos (determinar el grado de propagación)
Asimismo, el tipo de biopsia que se realizará dependerá de varios factores, como el tipo de problema pulmonar, la ubicación de la lesión y el estado general de la persona.
La biopsia pulmonar es un examen médico que se realiza para comprobar si los tejidos pulmonares padecen alguna patología o si sufren cáncer. En la prueba se utilizan imágenes para localizar alguna anormalidad en el tejido pulmonar, y a continuación extraer una pequeña muestra para analizarla con microscopio.
En un examen normal, los tejidos son normales y no hay cáncer ni proliferación de bacterias, virus u hongos si se realiza un cultivo.
Significado de los resultados anormales
Un resultado anormal puede tener las siguientes causas:
Infección pulmonar viral, bacteriana o micótica.
Células cancerosas (cáncer pulmonar, mesotelioma).
Neumonía.
Esta prueba suele tener una duración de treinta a sesenta minutos y puede usar un sistema de imagen para visualizar e identificar la zona elegida para la biopsia.
Para realizar la prueba deberá sentarse sobre una mesa con los brazos extendidos, mientras se le administra un sedante relajante y se le inyecta un medicamento para el dolor local. A continuación, se le hará un pequeño corte en la piel, por el cual se introducirá la aguja para la biopsia, con la que se extraerá una muestra del tejido pulmonar. Cuando la intervención finalice, se retirará la aguja de la zona, se hará presión en el área afectada y cuando el sangrado haya parado, se colocará una venda.
Al finalizar la biopsia pulmonar se realizará una radiografía del tórax, mientras que la muestra obtenida se envía a un laboratorio para su análisis.